Una estela roja protege a Central City de los rastros amarillos y negros dejados por otros velocistas (Zoom y Black Flash). Jay Garrick, Barry Allen, Wally West y Bart Allen mantienen vivo ese destello rojo con un rayo amarillo en el pecho que permite a los seres humanos, comunes y corrientes, dormir tranquilos.
Para 2008 aún era fanático de las historietas de Flash, lo sigo siendo de hecho. Ese año la magia se trasladó a Beijing y “Lightning Bolt” inició su dominio. Entendí que el reino de la velocidad no estaba distribuido en mundos paralelos donde distintos “elegidos” hacían uso de ese poder para bien o para mal, según el caso. Dicho reino está anclado en el mar Caribe, donde descendientes de africanos, traídos como esclavos por los ingleses, hacen gala de su potencia física para desafiar el espacio tiempo.
China, con su bandera roja de estrellas amarillas, vio a Usain Bolt lograr por primera vez la triple corona olímpica, los 100 y 200 metros planos así como el relevo corto (4 x 100). Monarca absoluto de la velocidad, se alzó también, y para siempre, con el corazón y la simpatía del público a nivel mundial.
Los 100 metros planos son, sin lugar a dudas, la prueba deportiva más espectacular que existe, pero dura 10 segundos. Bolt gracias a su magia para dominar el tiempo y la velocidad, los manipuló a su antojo, y logró extender la duración de la prueba. Entregó a los aficionados un espectáculo de un solo hombre, rodeado de increíbles actores de reparto, que iniciaba en el calentamiento y se extendía hasta una infinita sesión fotográfica al final de la prueba, un show garantizado.
En Londres 2012 el mundo buscaba la confirmación de un héroe capaz de desafiar los límites del cuerpo en pro del espectáculo, así sucedió. En Río 2016 muchos reservaron la primera fila para ver el declive, la caída de un ídolo, varias lesiones previas ponían en duda la capacidad de “Lightning Bolt” para mantener su reinado, no ocurrió.
Usain Bolt ganó los nueve oros olímpicos que disputó en la pista, pero su triple triple corona se vio empañada por el doping de su compañero Nesta Carter en el relevo corto de Beijing 2008. “El Rey de la Velocidad” devolvió la presea dorada a principios del 2017, días en los que confirmó su retiro definitivo del atletismo.
Amarillo y negro, la estela distintiva de “Usain Gold”. Colores vistos desde atrás por una generación de sorprendentes velocistas. Misma que en Londres 2012 puso a 7 de los 8 clasificados a la final de los 100 metros planos por debajo de los 10 segundos. El único en no lograrlo fue Asafa Powell, el hombre que más veces ha bajado esa simbólica frontera, quien cruzó la meta cojeando después de sufrir un tirón (11.99).
En noviembre de 2018 Usain Bolt dio por terminado su periodo de prueba con el equipo australiano de fútbol Central Coast Mariners al no llegar a un acuerdo comercial.
Este texto fue publicado originalmente en la edición 22 de la revista El Rollo, 10 años.
Fotos: Bolt 1 y 2 Simon Bruty, Bolt 3 Donald Miralle. Sport Illustrated. Bolt 4 Cameron Spencer Getty Images.
Jorge Mendoza
Editor general revista El Rollo
“Ramonero de corazón y no se mucho de nada pero me gusta aprender”.
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